
Imagen de Oscar Guarín
Oremos:
Sálvanos señor
de los salvadores de la patria.
Sálvanos señor
de los hombres de bien,
y sus familias,
y sus banderas.
Imagen de Oscar Guarín
Oremos:
Sálvanos señor
de los salvadores de la patria.
Sálvanos señor
de los hombres de bien,
y sus familias,
y sus banderas.
Soñé que llegaba tarde a un congreso de literatura. El congreso ocurría en un viejo edificio blanco en ruinas. Las paredes tenían enormes grietas y en el piso sólo quedaban algunas baldosas quebradas, dejando al descubierto, en casi todo el espacio, el cemento de color gris. Cuando llegaba me daba cuenta que la gente estaba alterada. Un profesor que conocía me veía llegar y me decía: “Qué bueno que llegó, tendremos a alguien para ahorcar”.
Manifesto do Livro
Nós, abaixo assinados, que escrevemos, produzimos, publicamos e fazemos circular o livro no Brasil, vimos nos manifestar pela defesa dos valores democráticos e pelo exercício pleno da democracia em nosso país, de acordo com as normas constitucionais vigentes, no momento ameaçadas.
Não podemos imaginar a livre circulação de ideias em outra ordem que não seja a da diversidade democrática, gozada de forma crescente nas últimas décadas pela sociedade brasileira, que é cada vez mais leitora e tem cada vez mais acesso à educação.
Ainda podemos nos recordar facilmente dos tempos obscuros da censura às ideias e aos livros nos 21 anos do regime ditatorial iniciado em 1964.
A necessária investigação de toda denúncia de corrupção, envolvendo a quem quer que seja, deve obedecer às premissas da legalidade e do Estado democrático de direito.
O retrocesso e a perda dos valores democráticos não interessam à maioria do povo brasileiro, no qual nos incluímos como profissionais dedicados aos livros e à leitura.
Ao percebermos as conquistas democráticas ameaçadas pelo abuso de poder e pela violação dos direitos à privacidade, à livre manifestação e à defesa, combinadas à agressividade e intolerância de alguns, e à indesejada tomada de partido por setores do Poder Judiciário, convocamos os profissionais do livro a se manifestarem em todos os espaços públicos pela resistência ao desrespeito sistemático das regras básicas que garantem a existência de um Estado de direito.
Dizemos não a qualquer tentativa de golpe e, mais forte ainda, dizemos sim à Democracia.
El fracaso
Hubo una época
en que todo me salía mal
perdí el pelo
y dos dientes.
Mi mujer me engañaba
con mi vecino republicano
A publicação pela primeira vez, no Brasil, de um conjunto de textos do crítico literário cubano e professor da Universidade de Yale Roberto González Echevarría permite ao leitor brasileiro um percorrido detalhado por autores, temas e obsessões críticas em torno da literatura hispano-americana, assim como algumas de suas conexões com a literatura espanhola.
Cuando juego con mi hijo
Con sus lanzas y escudos
Y sus caballos
imaginarios
Yo también me transformo.
Por instantes me olvido
Del sufrimiento
Y del cuerpo.
Cachipay es un pequeño pueblo a 60 kilómetros de Bogotá, incrustado en las montañas que bordean la cordillera oriental de Colombia. Una de sus casas en medio al verde intenso alberga un inquilino famoso pero que, hasta hace poco tiempo, era casi un desconocido en el campo literario. Habiendo publicado su primera novela, Primero estaba el mar, en 1983, cuando trabajaba como mesero de un bar de salsa en Bogotá, las relaciones de Tomás González con la fama han sido esquivas y conflictivas. Etiquetas como “escritor de culto” o “el secreto mejor guardado de la literatura colombiana” rodean la mitología creada en torno a su nombre y su figura.
Hay libros que después de leerlos me producen una sensación, un tanto melancólica, relacionada con la imposibilidad de conocer a su autor, o más aún, con la imposibilidad de convertirme en su amigo. Acabo de leer uno de estos libros, Satura del ensayista paisa Jaime Alberto Vélez (1950-2003), publicado en agosto del 2013 por la editorial de la Universidad de Antioquia.
En el prólogo al libro que reúne algunos de sus ensayos y dos cuentos breves, Mario Jursich recuerda las conversaciones telefónicas que mantenía con Jaime (voy a decirle Jaime como si en verdad fuéramos grandes amigos) y destaca algunos trazos de su personalidad, como su obsesión por corregir y enmendar sus textos hasta el último momento o su convicción de que la crítica no debería ser ni una rencilla personal ni un ajuste de cuentas. Pero, sobre todo, lo que me transmiten las palabras de Jursich es algo que comprobé después con la lectura de los ensayos: el humor y la inteligencia de Jaime. Un humor corrosivo atraviesa la mayoría de sus piezas ensayísticas que el autor había publicado entre 1998 y 2003 en la revista El Malpensante. Todas ellas relacionadas con la literatura y el campo literario.
Yo también tuve mi visión
Sentado en una banca del metro
Escuchando un disco de Marco Mahler
Mientras veía una chica
En su libro Tren fantasma a la estrella de oriente Paul Theroux afirma que escribir sobre viajes se volvió una manera de comprender su vida, lo más cerca que llegaría de una autobiografía. Creo que es posible encontrar ideas semejantes en varios escritores contemporáneos que hacen del viaje y el desplazamiento el eje central de sus narrativas. Esa centralidad de una determinada subjetividad establece una diferencia básica con la forma inicial de lo que sería clasificado como relatos o literatura de viajes. Antes lo que se colocaba como central para este tipo de literaturas era precisamente el descubrimiento y el confronto con un otro radicalmente distinto de nosotros.